Como definición de la palabra contagio podríamos encontrar una primera que la describe como la transmisión o adquisición de una enfermedad por contacto con el germen o el virus que la produce; y una segunda, como la transmisión de sentimientos, actitudes, costumbres, gustos, simpatías, etc.
Vamos a quedarnos con esta segunda.
La fuerza que puede tener un contagio de propagarse, es por todos conocida…
Y el mejor contagio de todos… ¿adivina cuál es?
Pues el de la risa… ¡sin lugar a dudas!
Pues el de la risa… ¡sin lugar a dudas!
Hay muchísimas pruebas de ello, como por ejemplo este vídeo que te dejo al final del artículo, grabado en un metro, un día cualquiera…
¿Alguna vez te ha dado un ataque de risa que no podías parar?
¿Me lo cuentas?
Me encantaría reírme contigo…
Me encantaría reírme contigo…
¡Hasta pronto!